23/05/24. El caso de corrupción más grande que ha destapado el gobierno bolivariano, es el de Pdvsa-Cripto. Se le conoce de esta forma porque el desastre lo tenían exfuncionarios que disponían de cargos importantes en la estatal petrolera, bajo el liderazgo de Tareck El Aissami.
Un liderazgo licencioso y silencioso que a más de uno sorprendió, aunque otros ya sospechaban la cosa. Lo cierto es que el presidente Nicolás Maduro sí ha expresado, en varias oportunidades, que se sintió traicionado. También ha dicho que, pese a la tristeza, El Aissami y todos los detenidos deben pagar por el daño que hicieron. Llegó a proponer una reforma constitucional para incluir la cadena perpetua como condena para los corruptos.
"Caiga quien caiga", es su consigna para afirmar que no habrá perdón para nadie, asegurando que dirigió las investigaciones y continuarán hasta que caigan todos los traidores corruptos.
Esta trama de corrupción Pdvsa-Cripto generó pérdidas millonarias al Estado venezolano. Dinero que pudo ser invertido en alimentos o servicios públicos, sobre todo, porque el robo lo efectuaron cuando más dura estaba la situación para los venezolanos y venezolanas durante la crisis sanitaria de la pandemia.
De hecho, según afirmaciones del Fiscal General de la República, Tarek William Saab, hasta funcionarios estadounidenses estaban metidos en el paquete y la administración de ese país enterada de todo el desfalco con el fin de apoderarse de las riquezas del pueblo venezolano aprovechando la traición del grupo liderado por el exministro de Petróleo y expresidente de Pdvsa.
Por cierto que, asimismo, admitió que el objetivo de El Aissami y compañía, era desprestigiar al gobierno de Maduro. Para ello, estaban involucrados Leopoldo López y Julio Borges, así como varios periodistas de ultraderecha, entre esos, Roberto Deniz y Ewald Scharfenberg.
Actualmente, se registra un total de 67 detenidos, contando a Samark López, un empresario que está embarrado hasta la coronilla en este caso de corrupción.
Samark, quien está convicto y confeso, reveló a las autoridades venezolanas las dos modalidades aplicadas en un esquema de corrupción en el que participaron los golpistas Leopoldo López y Borges, desde 2020 hasta 2022.
- Asignaciones de embarques petroleros a diferentes empresas a los fines de repartir altas comisiones a contratistas que tienen vinculaciones con los partidos de ultraderecha Primero Justicia y Voluntad Popular. Las ganancias oscilaban entre 120 a 140 millones de dólares, dependiendo del marcaje en el mercado, informó Misión Verdad
- Igualmente, exigían a los contratistas que, en lugar de pagar sólo el precio de crudo, también enviaran diluyentes o derivados petrolíferos para que obtuvieran doble ganancia.
Así opina la gente
A las dos de la tarde, en el centro de Caracas, la gente anda en lo suyo. Algunos en la plaza Bolívar y plaza El Venezolano, o en sus alrededores, descansan un rato para seguir con el día. Sin embargo, siempre están dispuestos a emitir su opinión.
Al consultarles sobre este caso de corrupción, consideraron positiva la gestión anticorrupción del gobierno nacional y la detención del exministro Tareck El Aissami. También expresaron el dolor, la decepción por esta traición y solicitaron continuar las investigaciones “porque debe haber más”.
Para Nerio Alvarado, la acción perpetrada por el grupo que lideró El Aissami le dolió al presidente Maduro y ese dolor se pudo notar en su rostro. “Duele la traición, y más la traición de un amigo a quien le diste tu confianza, tu cariño y tu amor. Y más si te traiciona en tus ideales”, destacó.
Igualmente, condenó que esas acciones hayan dañado tanto al pueblo con la pérdida de millones de dólares, pero que, además, buscaba desprestigiar a la revolución y hacerla caer.
Por su parte, el señor Silvio González, quien se describió como hombre chavista, madurista, comunista “como la gente quiera”, manifestó que tiene sentimientos encontrados respecto a la detención de El Aissami. Como ser humano, dijo, “siente rabia y lástima”, porque el expresidente de Pdvsa era de confianza no sólo para los presidentes Hugo Chávez y Nicolás Maduro, también del pueblo.
Además, instó al pueblo a “ponerse las pilas”, porque son los venezolanos y venezolanas quienes tienen que “desechar a todo aquel que cometa corrupción y quieran dañar a la revolución”.
Karen Salazar, por su parte, se siente satisfecha con la gestión anticorrupción del Gobierno, aunque alertó que lo de Tareck El Aissami es la “gota que derramó el vaso”, por lo tanto, llamó a “profundizar en las investigaciones porque debe haber más”.
Sobre la propuesta de una reforma constitucional para incluir la cadena perpetua como condena a los corruptos, Emilia Solari, indicó que esta debe ser sometida a consulta popular, porque es una necesidad.
“Es doloroso, porque Tareck fue un hombre que se formó con el presidente Chávez”, lamentó Marianne Carrillo Gómez, mujer emprendedora de la plaza El Venezolano. Al mismo tiempo, opinó que el Gobierno debe tener más control porque ese “robo al pueblo venezolano” fue “por millones y millones de dólares”. En ese sentido, calificó de desleal al exfuncionario y a todos aquellos que han engordado sus bolsillos a costa del dinero que pertenece a Venezuela.
Consultamos también a jóvenes, aunque algunos dijeron que desconocían sobre el tema, Douglas Ariza, un joven de veintiséis años, condenó el robo de millones de dólares, y consideró la propuesta de cadena perpetua como una medida para impedir que sigan ocurriendo estas acciones. "Esas personas solo manchan el nombre del país", sentenció Ariza.
POR SARAH ESPINOZA • @sarah.spnz
FOTOGRAFÍA DENNYS GONZÁLEZ • @dennysjosegonzalez