27/03/25. De muerte lenta. Usted baja por La Hoyada hasta la esquina El Muerto, y no sólo viaja en el tiempo a la época de los techos rojos de la ciudad, sino que mientras profundiza en uno de los rincones más nostálgicos de Caracas, las casas antiguas te van ofreciendo toda clase de ofertas gastronómicas a precios insólitos: hamburguesas a 1$ y 3$, pinchos a 1$, sopas, parrilla, pollo en brasas, pollo a la broaster, helados, postres varios y más. Sin embargo, la propuesta culinaria de la esquina El Muerto se especializa en las arepas: una alternativa que se agradece, teniendo en cuenta que las areperas de antaño están curiosamente en peligro de extinción.
Si quieres comer sabroso y a buen precio, acércate a la esquina El Muerto: una esquina que más bien está llena de mucha vida y sabor.
Las Rejas Azules
La competencia de las areperas de la esquina El Muerto es mordaz y sin piedad. Todas son relativamente baratas, y cada oferta es más tentadora que la otra. Por lo general, te ofrecen arepas con tres contornos y otras minucias, y combos para resolver la papa. Las ofertas son tan creativas como generosas: está la arepa "Colegiala", la "Tumbarrancho", "Monstruo Arepa", "La Quita Ruido", "La Rumbera", "La Reina del Sabor", "La Junior", "Pizza Arepa", "Arepa con tortilla" y más. Hay una ensalada que llaman "Brujería", pero con ese nombre no me atreví a preguntar. Los precios en bolívares: a partir de 210 una arepa de dos contornos hasta 800 y más. Por lo general, puedes armar una arepa de tres contornos en el siguiente orden: una fritura, una ensalada y queso. Hay otras alternativas más opíparas, por supuesto.

De todas las opciones, nos decantamos por el equipo de Las Rejas Azules, local regentado por Tania Arismendi. Elegimos este espacio, no sólo porque fueron los más simpáticos, sino que fueron los únicos que accedieron a darnos factura. Los demás espacios, al parecer, deberían saldar unos cuantos asuntos con el Seniat.
"Hace dieciocho años empezamos este proyecto, pero el boom de la esquina El Muerto se desató hace dos años. Desde entonces, hemos venido creciendo humildemente", rememora Tania.
Nathan, Sheila y yo, nos dispusimos a probar el gourmet de las Rejas Azules. Con fondo musical de Franco De Vita, canciones cristianas y joropo, Nathan pidió una reina pepiada con queso; Sheila tomó la mejor decisión: chuleta, de todito (ensalada con todo tipo de jamones, chorizo y fiambres) y queso amarillo y yo elegí la especialidad de la casa: "Vaina con vaina" (carne, pollo y chuleta bañados en salsa barbecue); mi arepa tuvo como acompañantes queso guayanés y ensalada de gallina.

De tomar, elegimos jugo de melocotón, fresa y lechoza. Te preparan el jugo en el momento y puedes elegirlos sin azúcar. Son jugos grandes y espesos. También tienen refresco.
Las arepas son bastante grandes, y bastan para saciar el apetito. Mi arepa "Vaina con vaina" no estuvo mal, pero creo que mis expectativas fueron muy altas para ese nombre tan original: no fue una vaina del otro mundo, pero estuvo sabrosa.
El picante de la casa merece una mención especial, ya que es bastante fuerte: me sacó lágrimas. También tienen salsa de queso y ajo. Nathan puso la discusión filosófica en la mesa, de que no se debe comer con salsa, para disfrutar de la comida y sus sabores originales. Yo soy del team salsero, así que embadurné mi arepa de todas las salsas que habían en la mesa.
Cabe señalar, que en este espacio no expenden bebidas alcohólicas. Suponemos que será para que la gente no se instale mucho rato en el local. Las Rejas Azules también ofrecen pollo a la broaster y chicharrón.

Sabores de ultratumba
Nos fuimos con la barriga llena, el corazón y el bolsillo contentos: solo gastamos 20$ por cinco arepas full equipo y tres jugos. Además, tuve la fortuna de conseguir bodegas abiertas a las nueve de la noche. Resulta que los abastos y quincallas abren hasta pasada la media noche de jueves a sábado y tienen punto. Gracias a eso, pude hacer un minimercado para mi casa.
Si quieres comer sabroso y a buen precio, acércate a la esquina El Muerto: una esquina que más bien está llena de mucha vida y sabor. Casi todos los locales están activos desde las cuatro de la tarde, y de jueves a sábado trabajan hasta las dos de la mañana.

POR MARÍA EUGENIA ACERO • @mariacolomine
FOTOGRAFÍA NATHAN RAMÍREZ • @nathanfoto_art