17/04/25. A partir de ahora, así esté caminando por su cuadra, lo llamarán temporadista. Deberá olvidar que tuvo un nombre y asumirse como tal.
1. Lo básico: poner cara de temporadista.
2. Acostúmbrese a no tener nombre y ser parte de cifras de movilización en asuetos.
3. Si no salió de su ciudad, lo obligará a ser turista en su propia tierra.
4. No estar de vacaciones no es impedimento para ser temporadista.
5. Le aplicarán precios de temporadista.
6. Los reporteros los buscarán para que hable del asueto.
7. Cuando se acaben los días libres volverá a ser usted mismo.
8. Si es temporadista de verdad, vaya y métase a la playa.
9. Asuma el amuñuñamiento como norma en estos días.
10. Retroceda pronto.



POR NATHALI GÓMEZ • @lanacha
ILUSTRACIÓN JUSTO BLANCO • @justoblancorui