08/05/25.
—¿No tienes ya bastante dinero, hijo? ¡No pintes más, que ya has trabajado bastante!
Y la madre vieja besaba tiernamente a su hijo con besos blancos como sus canas dulces.
El hijo le decía: “No, madre, cuando yo tenía que ganar dinero para ti, pintaba sin pintar; ahora, ya holgados, es cuando pinto; y no dejaré nunca de hacerlo. Mi arte es como tu religión. No se pinta ni se reza para ganar, sino cuando no se tiene qué comer; y aun entonces, si no hubiera que darle a una madre…”.
—La religión es otra cosa, hijo.
El hijo se fue a su cuarto; y en la oscuridad abierta al blanquecino jardín húmedo que olía a jazmines con relente, se echó negro y cerrado contra la cama blanca y calló, calló mucho sonriendo.
De: Platero y yo (1914).
Juan Ramón Jiménez (Moguer, España, 1881-Puerto Rico,1958)
Célebre poeta español cuya lírica evolucionó desde las últimas derivaciones del modernismo hacia una poesía a la vez emotiva e intelectualista. Entre sus obras más conocidas tenemos: Elegías (1908-1910), Olvidanzas (1909), La soledad sonora (1911), Poemas mágicos y dolientes (1911), Melancolía (1912), La estación total (1946), Romances de Coral Gables (1948), Animal de fondo (1949) y Laberinto (1913), así como el libro en prosa Platero y yo (1914). Ganó el Premio Nobel de Literatura en 1956 por el conjunto de su obra, entre la que destaca especialmente la obra lírica en prosa Platero y yo.
ILUSTRACIÓN: CLEMENTINA CORTÉS