18/10/24.
Fue en Barrow in Furness, que es un puerto en la costa occidental de Inglaterra. Allí, cierto día, después de un trabajo de arqueo, estaba yo sentado sobre un barril, en un muelle abandonado. Acababa de escribir un soneto —eslabón de una cadena de varios— en el que el hecho de estar sentado en ese barril era un elemento de construcción. Se me aproximó una muchacha, por así decir —alumna, según después supe, del liceo—, y entró en conversación conmigo. Vio que estaba escribiendo versos y me preguntó, como en estas ocasiones se acostumbra a preguntar, si yo escribía versos.
Respondí, como en estos casos se responde, que no.
La tarde, según su obligación tradicional, caía lenta y suave. La dejé caer.
Es conocida la índole portuguesa y el carácter propicio de las horas, independientemente de las índoles y de los portugueses. ¿Fue esto una aventura amorosa? No alcanzo a decirlo. Fue una tarde, en un muelle lejos de la patria; y hoy es, ciertamente, un recuerdo de oro oscuro. La vida es extremadamente compleja, y los azares son, a veces, necesarios. El cuento no tiene moral, desde el principio. El oro oscuro quedó húmedo y la tarde cayó definitivamente.
Extraído de: ciudadseva.com
Fernando Pessoa (Lisboa, 1888-1935)
Poeta y escritor portugués, uno de los más brillantes e importantes de la literatura mundial y, en particular, de la lengua portuguesa. Escribía poesía encarnando diversos autores ficticios, heterónimos con diferentes estilos, modos y voces, un desdoblamiento literario de su personalidad que lo convirtió en un autor enigmático. A diferencia de los pseudónimos, sus heterónimos son personalidades poéticas completas: identidades falsas que de algún modo se vuelven verdaderas a través de una manifestación artística propia y diversa del autor original. Entre ellos destacan Alberto Caeiro, Álvaro de Campos y Ricardo Reis. Con alguno de estos nombres llegaba incluso a escribir y publicar críticas de obras que había escrito bajo otros nombres. Su poesía fue recogida en los volúmenes Obras completas: I. Poesías, de Fernando Pessoa (1942); II. Poesías, de Álvaro de Campos (1944); III. Poemas, de Alberto Caeiro (1946); IV. Odas, de Ricardo Reis (1946); V. Mensagem (1945); VI. Poemas dramáticos; VII. y VIII. Poesías inéditas, 1955-1956. Su obra ensayística se encuentra en Páginas íntimas de autointerpretación (1966), Páginas de estética y de teoría y crítica literarias (1967) y Textos filosóficos (1968). Un cuarto heterónimo de gran importancia en la obra de Pessoa es Bernardo Soares, autor del Libro del desasosiego (1982) su principal contribución en prosa a la literatura universal.
ILUSTRACIÓN: CLEMENTINA CORTÉS