21/01/25. Antes de iniciar la lectura, les invito a quitarse los lentes del prejuicio sobre este artista y la música que hace, para que puedan entender las dimensiones del proyecto llamado "Debí tirar más fotos".
Así se titula el más reciente álbum de Benito Antonio Martínez Ocasio, mejor conocido como Bad Bunny, en el cual no solo nos trae ritmos contagiosos y letras ingeniosas, sino que también sorprende con un profundo respeto y admiración hacia los adultos mayores.
El llamado "Conejo Malo" se transforma en un cronista y erige un puente intergeneracional que conecta el pasado con el presente, dándole voz a aquellos que han construido la historia de Puerto Rico.
Su lírica se convierte en un manifiesto social y cultural. Más allá de la fusión de los ritmos caribeños como la plena y la salsa con el reguetón y el dembow y las colaboraciones estelares que hizo, Bad Bunny nos sumerge en un análisis de la realidad puertorriqueña, poniendo el foco en temas como el respeto hacia los adultos mayores, el valor de las raíces y la gentrificación.
El reconocimiento a los adultos mayores
La portada del álbum donde se observan dos sillas plásticas en un patio con plantas de cambur de fondo, es evocación pura de los momentos vividos con padres y abuelos en cualquier lugar de América Latina y el Caribe. A través de esta simbología, Benito reivindica la sabiduría y la experiencia de las generaciones anteriores, invitándonos a aprender de su legado, a vivir los instantes, reencontrarnos en un abrazo y construir un futuro en el que todos tengan cabida.
La presencia de figuras icónicas como el actor Jacobo Morales en uno de los videos musicales es un claro ejemplo de cómo el artista busca conectar con la historia y la identidad de su país.
Pero quizás uno de los homenajes más emotivos sea el dedicado a Toñita, una puertorriqueña que lleva 50 años a cargo del Club Caribbean Social Club ubicado en Brooklyn y quien ha resistido durante años los embates de la gentrificación en Nueva York, manteniendo vivo un pedazo de su tierra en la gran manzana.
Raíces y valores de la Isla del Encanto
En cada canción el intérprete pinta un cuadro vibrante de Puerto Rico, desde sus paisajes urbanos hasta sus tradiciones más arraigadas.
"Debí tirar más fotos" es un llamado al sentido de pertenencia y a no olvidar de dónde venimos. El álbum celebra la cultura caribeña en toda su diversidad, desde la música hasta la gastronomía, pasando por las tradiciones orales. Pero también es una crítica a la pérdida de valores y a la homogeneización cultural.
La gentrificación como eje central
Bad Bunny consciente del impacto mediático que tiene, ha implementado una de las mejores campañas en sus plataformas digitales para visibilizar las problemáticas sociales y culturales de Puerto Rico.
La gentrificación es uno de los temas más recurrentes en el disco y se ponen de manifiesto los efectos de este fenómeno en las comunidades más vulnerables.
Sin embargo, el artista no se limita a la denuncia, sino que propone pensar cómo podemos construir un futuro más justo y equitativo.
En síntesis, "Debí tirar más fotos" es mucho más que un simple álbum de música para gente joven. Es una invitación a reflexionar como latinoamericanos sobre nuestra identidad, nuestros valores y nuestro lugar en el mundo.