• Inicio
  • Cuentos
  • Minimanual
  • Agenda Cultural
  • Música
    • Boleros que curan el alma
    • Bitácora sonora
    • Música en acción
  • Caracas
    • Almanimal
    • Caminándola
    • Ciudad
    • En foco
    • Laguna de babel
    • La vida es juego
    • Pichones de Sibarita
    • Trama cotidiana
    • Trota CCS
  • Soberanías Sexuales
  • Miradas
    • Bajo la lupa
    • Crónicas gráficas del patrimonio
    • Envejecer y seguir siendo
    • Falsas Memorias
    • Miradas
    • Séptima morada
    • Visiones Liberadoras
  • Entrevistas
    • Antroponautas
    • Entrevistas
  • Mitos
  • Literato
    • Mejor ni te cuento
    • Préstamo circulante
    • Son tres párrafos
  • La Revista
    • Somos
    • Columnistas
Puedes buscar por Título de la noticia
Inserte el Título

Don Bosco de la halterofilia

15/05/25. Henry Velásquez (Caracas, 20/02/1977) es el buque insignia de los entrenadores venezolanos que ha logrado con su apostolado deportivo y social convertir al levantamiento de pesas en una de las disciplinas más exitosas de los últimos tiempos.

 

 

El oropel de las grandes victorias deportivas no ha cambiado su vocación bosconiana por educar y tender la mano a los chamos con más necesidades que llegan a su escuela cargados de ilusiones...

 

 

Este caraqueño de Santa Teresa que de niño pasaba las horas jugando en la plaza La Concordia, la misma que en tiempo del General Juan Vicente Gómez había sido el centro de tortura de los enemigos de la dictadura, comparte su devenir en el deporte que se inició primero como practicante del wushu y luego como uno de los mejores levantadores de pesas del país en las categorías de los 70, 76 y 86 kilogramos.

 

 

Quedó campeón en el Nacional de Valencia en 2002 en representación de Caracas, pero la dirigencia de la Federación Venezolana de Pesas, comandada entonces por José Herrera, descartó los sobrados méritos de Velásquez para integrar a la selección nacional y fue cuando tomó otra elección que marcó su vida y su carrera deportiva.

 

 

“A los 25 años me retiré, porque no me llamaron a la selección”, recuerda todavía con la amargura de aquella decepción, pero feliz de haber tomado la ruta de la formación de nuevos talentos. “Con 21 años me había graduado en el Pedagógico, era profesor en un colegio Madison en El Cafetal, di un paso al costado y me dije que iba a comenzar a entrenar”.

 

 

Su apostolado en este deporte se inició con las uñas, gracias a los materiales de trabajo que le aportó el otrora ministro del Deporte, Eduardo Álvarez, y un local en estadio Brígido Iriarte que le facilitó Rafa Romero, el más grande velocista en la historia del país, quien fungía de director del estadio capitalino. Allí comenzó a trabajar desde abajo, formando chamos, entre la que figuraba Dayana Chirinos, que al tiempo la convirtió en una de las mejores pesistas femeninas de las dos últimas décadas en Venezuela.

 

 

Pero su gran obra la construyó como una suerte de Don Bosco de las pesas, como lo apodan sus amigos cariñosamente, en la Unidad Educativa Niño Simón en Montalbán, Caracas. Con el apoyo de la profesora Levia Velásquez, desarrolló un nuevo proyecto de detección de talentos en las pesas, del cual surgió una de las máxima figuras de nuestro país: Keydomar Vallenilla, a quien llevó a ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 y la presea dorada en el Mundial de Bogotá 2022.

 

 

El oropel de las grandes victorias deportivas no ha cambiado su vocación bosconiana por educar y tender la mano a los chamos con más necesidades que llegan a su escuela cargados de ilusiones y Velásquez termina apoyándolos en todo para que salgan adelante, compartiendo el pan, la arepita y hasta pagándoles el pasaje para que no abandonen el gimnasio y sus sueños.

 

 

“Mucha gente me dice que por qué sigo en la escuela, si soy un entrenador de élite mundial, pero la verdad es que mi sueño es tener una casa hogar, una suerte de escuela de talentos deportivos, donde podamos ayudar a los niños en situación de calle, con un hogar que no esté bien constituido para que estudien hasta los 18 años y salgan nuevos campeones”, confiesa en relación a este proyecto educativo, social y deportivo que sería la cúspide de su apostolado.

 

 

 

 

 

 


POR GERARDO BLANCO •  gerarblanco65@gmail.com

 


ILUSTRACIÓN JUSTO BLANCO • @justoblancoru

#HenryVelásquez #Halterofilia #Educación

Compartir

Noticias Relacionadas

La natación entró por el carril

  • 29/06/2023

El primer crack Vinotinto

  • 03/05/2024

"Tuti" silenció La Bombonera

  • 23/05/2024

Los juegos de la integración

  • 06/05/2023
Las actividades por la semana de los Museos

Hasta siempre Pepe

Llamar a la abstención electoral
Ubicación
  • Esquina de San Jacinto, Edificio Gradillas “C”, piso 1, Caracas 1010, Distrito Capital
  • 0212-3268703
Enlaces
  • Cuentos
  • Minimanual
  • Agenda Cultural
  • Boleros que curan el alma
  • Bitácora sonora
  • Música en acción
  • Ciudad
Enlaces
  • Soberanías Sexuales
  • Bajo la lupa
  • Antroponautas
  • Entrevistas
  • Mitos
  • Mejor ni te cuento
  • Préstamo circulante
Galería ¡CARACAS VIVA!
© 2022 ÉPALECCS | al ritmo de la ciudad