• Inicio
  • Cuentos
  • Minimanual
  • Agenda Cultural
  • Música
    • Boleros que curan el alma
    • Bitácora sonora
    • Música en acción
  • Caracas
    • Almanimal
    • Caminándola
    • Ciudad
    • En foco
    • Laguna de babel
    • La vida es juego
    • Pichones de Sibarita
    • Trama cotidiana
    • Trota CCS
  • Soberanías Sexuales
  • Miradas
    • Bajo la lupa
    • Crónicas gráficas del patrimonio
    • Envejecer y seguir siendo
    • Falsas Memorias
    • Miradas
    • Séptima morada
    • Visiones Liberadoras
  • Entrevistas
    • Antroponautas
    • Entrevistas
  • Mitos
  • Literato
    • Mejor ni te cuento
    • Préstamo circulante
    • Son tres párrafos
  • La Revista
    • Somos
    • Columnistas
Puedes buscar por Título de la noticia
Inserte el Título

Zorian Ramírez Espinoza: "El arte permite resguardar la memoria"

El músico y escritor está impulsando una plataforma para los poetas venezolanos jóvenes con "Si el río abriese los ojos"

Provoco siempre al que quiere negarme

Zorian Ramírez Espinoza

24/06/25.- Zorian Ramírez Espinoza (Caracas, 1996), es un chamo que no ha perdido el tiempo. Con apenas 28 años, ya tiene una licenciatura en Artes mención Música por la Universidad Arturo Michelena (UAM) y es contrabajista de la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas. Además, ha sido reconocido ya como poeta y ha llevado su palabra al campo del ensayo, donde se mueve como pez en el agua.

Además de construir una trayectoria profesional sólida, Zorian está emprendiendo junto con Bolívar Pérez y Juan Lebrún el proyecto Si el río abriese los ojos: Antología de la continuidad. Se trata de una plataforma que visibiliza a poetas venezolanos nacidos a partir de 1990. Este singular título les rinde homenaje póstumo a Caneo Arguinzones y César Panza, y cuenta con el apoyo de El Círculo de Poesía. El resultado ha sido una voz impactante y diversa de la esencia de los jóvenes venezolanos de hoy en día. Entre los autores reseñados están Ance Jesús Zamora (finalista en el Slam de Mundial de Poesía, 2025), Pamela Rahms y Jesús García, entre muchos otros. El proyecto tuvo su primer encuentro presencial en mayo de este año en la sala TAC de Trasnocho Cultural ante una nutrida audiencia, ávida de poemas frescos. Por esto y muchas cosas más, vale la pena escuchar la voz poética y musical de Zorian Ramírez. Oído al tambor.

 

¿Cómo se define Zorian Ramírez?

No sé cómo responder esta pregunta, la verdad. No sé si me gusta la palabra "definir". Realmente, yo no creo que me defina como nada. Aunque algo que me gusta de mí quizás, es que soy una persona consecuente y apasionada. Pero no como definición. Definir es algo como muy directo, muy como una verdad absoluta. No creo en esas verdades absolutas.
 

¿Por qué el arte?

El arte ha estado en mi vida desde que nací. Antes de que naciera. Vengo de una mamá artista plástico, y de un papá que es cantante popular de salsa. Pero más allá de lo familiar, que ya genera como una influencia en cuanto a lo que es el gusto o las preferencias estéticas que uno tenga, también ha sido como un camino que yo he conseguido para poder hablar. Creo que, independientemente de que mis padres fueran artistas o no lo sean, también es una escogencia muy propia que me pertenece mucho a mí, a pesar de venir de donde vengo.

 

Eres músico, ensayista y poeta. ¿Qué aporta cada una de estas áreas a tu vida?

Lo que aportan estas cosas a mi vida, yo lo englobo como en sentidos más generales. La música y la escritura son como mis bastones de apoyo para continuar mi existencia. No hay una sin la otra. A los veinte también me probé como escritor: como alguien que podía producir con las palabras. Esto me ayudó muchísimo en un momento, porque escribir hizo que pudiera plasmar muchas cosas que veía muy grandes o percepciones que yo tenía de repente un poco distorsionadas de la realidad. Pude desprenderme un poco de lo que yo imaginaba y dejarlas en un lugar. Pude ver desde otro sitio mis percepciones, y realmente lo que me daba cuenta que todo era mucho más pequeño de lo que yo creía. Esto incluso me ayudó mucho con la música.

Si tu vida fuera un género musical, ¿cuál sería?

Creo que el género sería fragmentos discontinuos de escenas de películas. Creo que tendría un poco de melancolía, así como al estilo de las jenopedias de Ritza T; pero también tendría esa añoranza y esa cosa ingenua de la música popular venezolana. En este caso, creo que pudiera ser un galerón, que es muy bonito. ¿Por qué no? Es una música que te hace pensar en la horizontalidad del mundo, creo que también me gustaría que fuera una balada en inglés ¿Y por qué no? Una canción de una cajita de música.

Háblanos del proyecto Si el río abriese los ojos...

Si el río abriese los ojos: Antología de la continuidad, es un proyecto que nace de una visita que hace su editor, el editor de Círculo de Poesía en México, Alex Calderón. Él nos propuso a Bolívar, Juan y a mí armarlo. Ya hemos antologado más de treinta personas. Este proyecto ha crecido más de lo que pensamos inicialmente, y vino a ocupar un espacio que no tenía: la poesía de autores nacidos a partir de los años noventa.

Este trabajo genera también el mapeo de una generación que ha estado un poco desasistida, por circunstancias de la historia político-contemporánea venezolana, que atravesaba por diversos fenómenos de migración, de crisis económica. Esta generación necesitaba atención. Ha sido un trabajo arduo y muy hermoso también.

¿Cómo definirías la poesía de los jóvenes que has convocado en la antología que están preparando?

Hay unos criterios generales que manejamos Bolívar Pérez, Juan Lebrun y yo que son primero, el criterio del año de nacimiento: digamos que es el más general de todos. Claro, que la persona sea venezolana pues, aunque tenemos poetas que tienen doble nacionalidad.

Hay una cosa muy curiosa que nos pidió el editor, que fue una poesía vital, una poesía viva. Hay un criterio intrínseco que hemos encontrado, que no fue algo como que decidimos. Y es el tema de lo corpóreo, creo que es algo que atraviesa a casi todos los poemas, por no decir todos. Incluso el texto antológico que hemos preparado (lo pueden leer en la web). Comienza hablando sobre la temática del cuerpo y el cuerpo poético, cuerpo físico, cuerpo poético.

¿Cómo ves a los jóvenes de hoy en día? Mucha gente mayor dice que los chamos de hoy están dormidos.

No conozco a la gente que dice que los chamos de hoy en día están dormidos.  Creo que ese tipo de personas lo dice en cualquier momento histórico. Esas personas que tienen esa concepción de resistencia a lo nuevo. Realmente las nuevas formas de vida, las nuevas maneras, los nuevos dilemas de cada generación siempre van a generar resistencias, porque son nuevos. 

Son maneras diferentes de expresarse, maneras diferentes de afrontar la realidad. Siempre lo diferente va a generar resistencia. Yo no sé si hablar de los jóvenes hoy en día, pero hablo de mí. Creo que casualmente iba hoy temprano en la mañana pensando en algo parecido a esto de cómo somos los jóvenes aquí, o el fenómeno crisis, o el fenómeno qué sé yo. Cualquiera de estas cosas históricas, políticas que atraviesa el mundo, que atraviesa el país, en lo individual, en lo familiar. Este tipo de personas dice que todo está perdido. Creo que hay que ver la historia y estar perdido también es parte de la historia. 

Ciertamente es una generación muy particular. Ya ni siquiera la mía, es la última generación, yo nací en el 96. A pesar de que nací en diciembre del 96, es como básicamente ser del 97. Ya mi generación no es la última generación. Hay otra generación de otros muchachos, los Gen Z: ellos son completamente diferentes a nosotros, los millenials. Y sin embargo vemos que nos insertamos en una historia contemporánea bastante complicada. Porque digamos que ya las grandes cosas que promovían el cambio en el mundo han caído. Nos tocó el pastel de la posmodernidad, pero lo que pasó después era posmodernidad. Y es como que si nos tocara volver a aplicar ese discurso de que se pueden cambiar las cosas a pesar de que en el fondo uno sabe que no. Creo que divagué, pero por ahí va.
 

¿Cuál es el criterio para seleccionar a los poetas de esta antología?

Como dije en la pregunta uno, me cuido de definir la poesía de los jóvenes que estamos preparando. Si es de catalogarla de alguna manera es heterogénea, es diversa. Es transdisciplinar, porque muchos trabajan con la imagen, con la fotografía, con el collage, con la música, con el performance. Son como las características generales que hacen diferente a este dossier.

Creo que es una de las características de este dossier, pero también a nivel formal, a nivel de escritura, de estructura. Vemos voces que son completamente distintas desde poemas en prosa que desafían o que ponen en ese límite de la prosa. También hay poemas de muy largo aliento, en experimentaciones idiomáticas. Definiría esto es heterogéneo y parece una cosa tonta, porque bueno, sí, todos somos diferentes, pero realmente es lo que se puede observar.

¿De qué te gusta hablar en tus ensayos?

Me gusta esa concepción que dice el poeta cubano Octavio Armán, que un ensayo es una propuesta de lectura y creo que de eso van mis ensayos. He escrito ensayos sobre artistas visuales, sobre literatura; también hasta el momento han sido como los espacios donde me he movido. Sin embargo, todos vienen de un atravesar algo como de un atravesamiento lector o un atravesamiento. Son lecturas que me apasionan. Lo que me gusta hablar de mis ensayos es cómo yo habito desde la lectura.

¿Cómo es la vida de un músico en Venezuela?

La vida de un músico y la vida de un artista en general en Venezuela es muy difícil. Creo que incluso en los momentos de crisis, los que más sufrimos somos los artistas. A pesar de eso, dentro de lo difícil, creo que los que la tienen menos difícil, son los músicos. Y sin embargo, sigue siendo difícil para mí como músico desarrollar o pensar en una vida independiente. Aunque tengo ayuda de mi familia, viniendo del interior del país, realmente no es fácil una vida para un artista en Venezuela.

Cuéntanos de la influencia de tu mami en tu trayectoria (la artísta plástico Maigualida Espinoza).

Ay bueno, mi mamá es una influencia muy fuerte. Mi mamá es quien me lee o que me invita a leer los primeros poemas, a pesar de que a mí no me gustaba la poesía. Siempre me impulsó a leer y también creo que fue un aprendizaje por cercanía, de ver cómo trabaja. Aunque he tenido también otros amigos, amigos de mi madre que son también como mentores que uno ha tenido en la vida y también te han enseñado con su vida, con su trabajo de vida. Entre ellos: Nelida Mosquera, Miguel Arguinzones, por nombrar algunos de los, como de los más recientes, ¿no?

¿Qué les dirías a los jóvenes que quisieran vivir del arte?

El que quiere hacer del arte un camino de vida, tiene que estar ganado a que es un camino difícil. Tiene que estar dispuesto también a desilusionarse, a saber de que es algo que mucha gente no entiende. Mucha gente cree que el arte es inútil. Pero nos alimenta y es una experiencia de goce estético: no es material, es etéreo. Pero deja muchas huellas emocionales, recuerdos y permite resguardar la memoria. Permite explicarnos ante el mundo. Ahí reside el goce de vivir del arte.

Hay gente que lo hace en su juventud y dura un par de años y lo recuerda gratamente. Hay otros que sabemos que esto es un llamado, es una especie de llamado divino: es algo que cae y que no puedes ignorar. Ignorarlo, es caer en ansiedad, sentirte desencajado con el mundo. Hasta que escuchas esa voz interior, y sientes que eso te da una felicidad y una plenitud.

¿Qué mensaje le puedes dar a los lectores de Épale CCS?

Los invito a que lean siempre el dossier de Si el río abriese los ojos: Antología de la continuidad. Es un proyecto muy bonito. Mucha gente debe conocer ese proyecto: no es porque yo esté dentro de los compiladores, sino porque de verdad es proyecto muy lindo. Está participando gente muy diversa y vale la pena, vale la pena leernos, descubrirnos.

Por: María Eugenia Acero Colomine @mariacolomine

Fotos: Alexis Deniz @denizfoto

#ZorianRamírez #Poesía #Música #Ensayo

Compartir

Noticias Relacionadas

Zaida López, y su arte multidisciplinario 

  • 27/04/2023

Teresa Poleo: cuando la solidaridad hace comunidad

  • 18/07/2024

Mago Ibraín: Nada como hacer magia en tu país

  • 19/02/2025

Oscar Mayer: lo importante es no abandonar a los animales

  • 26/09/2023
La obra,

Comprometidos con la verdad

Marcar y vender productos en euros
Ubicación
  • Esquina de San Jacinto, Edificio Gradillas “C”, piso 1, Caracas 1010, Distrito Capital
  • 0212-3268703
Enlaces
  • Cuentos
  • Minimanual
  • Agenda Cultural
  • Boleros que curan el alma
  • Bitácora sonora
  • Música en acción
  • Ciudad
Enlaces
  • Soberanías Sexuales
  • Bajo la lupa
  • Antroponautas
  • Entrevistas
  • Mitos
  • Mejor ni te cuento
  • Préstamo circulante
Galería ¡CARACAS VIVA!
© 2022 ÉPALECCS | al ritmo de la ciudad