03/11/23. Las frases también son moda, como las que se usan en TikTok, casi todas marcadas por su profundo irrespeto de la gramática. Así, como si aquello fuese maravilloso, vemos crecer a una generación que dice cosas que no significan nada, que renuncia a los adjetivos y les parece genial. Sin embargo, esto no es un asunto de adolescentes, todo lo que nos rodea es resultado de una guerra de palabras que quieren llegar para borrar historias, ideas originales o descontextualizarlas.
En el feminismo esto pasa mucho. Algunos usan las palabras, las ideas, las reivindicaciones feministas para justificar incluso la muerte. Por ejemplo, alguno es capaz de decir que no está tan mal lo que pasa en Palestina porque después de todo, Israel es un “país occidental” y los palestinos usan la hijab porque son musulmanes -omitiendo que no lo son todos- y esto vale para que esté bien ir en su contra. Es incluso -dicen- feminista. Así, esta inclemente ofensiva contra un pueblo, que rompe todos los principios del derecho humanitario, goza de un “lavado de imagen púrpura” porque el agresor -afirman- es más feminista que el agredido.
Dentro del feminismo pasan cosas así. Por ejemplo, borrar del análisis las categorías marxistas que guiaron a mujeres como Eleonor Marx, Clara Zetkin, Alejandra Kollontai o Flora Tristán y crear un nuevo lenguaje, en el que se neutralizan las palabras. Así, se puede llamar a la revolución de no lavar los platos pero no reconocer que luchar por guarderías, cocinas populares, casas de reposo o lavanderías son banderas de un pensamiento que concluyó que en el capitalismo, para que sea posible explotar a un obrero, este necesita una esclava, que la prisión del hogar y sus violencias no es un hecho espontáneo de la maldad de un hombre sino el resultado de una convivencia marcada por la necesidad de mantener la vida y dedicarle el tiempo a producir un salario que no alcanza para pagar a otros que limpien, atiendan los hijos o cocinen.
¿Cómo puede un hombre que es violentado e irrespetado en permanencia, ser un sujeto que no violenta ni irrespeta? Es por eso que las socialistas piensan que el fin del patriarcado y el capitalismo han de darse juntos porque todo es un asunto de clases. Pero esto no se puede decir en papel glasé ni imprimir en un triángulo de tela. Todo planteamiento que se diga feminista pero que no reflexione, sino que busca foto, hashtag, franela y logo es neoliberal, es publicidad.
POR ANA CRISTINA BRACHO • @anicrisbracho
ILUSTRACIÓN ASTRID ARNAUDE • @loloentinta
