23/10/25.
A- Distraídos en razonar la inmortalidad, habíamos dejado que anocheciera sin encender la lámpara. No nos veíamos las caras. Con una indiferencia y una dulzura más convincentes que el fervor, la voz de Macedonio Fernández repetía que el alma es inmortal. Me aseguraba que la muerte del cuerpo es del todo insignificante y que morirse tiene que ser el hecho más nulo que puede sucederle a un hombre. Yo jugaba con la navaja de Macedonio; la abría y la cerraba. Un acordeón vecino despachaba infinitamente La cumparsita, esa pamplina consternada que les gusta a muchas personas, porque les mintieron que es vieja… Yo le propuse a Macedonio que nos suicidáramos, para discutir sin estorbo.
Z (burlón)- Pero sospecho que al final no se resolvieron.
A (ya en plena mística)- Francamente no recuerdo si esa noche nos suicidamos.
De: El hacedor (1960).
Jorge Luis Borges (Buenos Aires 1899 - Ginebra 1986)
Célebre cuentista, ensayista, poeta, catedrático y traductor argentino. Considerado entre los más grandes escritores en lengua castellana del siglo XX. Autor de libros fundamentales como Historia universal de la infamia (1935), Ficciones (1944) y El aleph (1949). Polémico por sus controversiales opiniones políticas, es no obstante una figura esencial de la literatura hispanoamericana, más allá de cualquier clasificación genérica.
ILUSTRACIÓN: CLEMENTINA CORTÉS