20/06/24. Lo recuerdo como si fuera ayer. En el año 2015, Alejandra Laprea y su combo convocaron a un evento llamado La gran putada. Se trataba de poesía feminista y erótica en el marco de una serie de eventos de calle. La convocatoria en esa ocasión fue en el Celarg. Llegamos mi mamá y yo, y nos recibieron varias mujeres que entre conversa y conversa estaban ensamblando libros cartoneros. Resulta que para esta actividad, nos pidieron nuestros poemas. Esos mismos poemas fueron impresos y formarían parte de unos libritos hechos por nosotras mismas. Recortamos, pegamos, engrapamos, pintamos, coloreamos y... voilá. Al cabo de poco rato ya teníamos en nuestras manos un poemario colectivo. No tuvimos que jalar mecate, no tuvimos que pagar cuantiosas sumas, no tuvimos que hacernos amigas de nadie importante para que nos prestaran atención y nos publicaran. En minutos se hizo la magia de la autogestión comunal. Aún conservo mi librito de cartón.
LIBROS DIFERENTES
Los libros cartoneros nacieron precisamente como una alternativa al exclusivismo del mundo editorial. Resulta que la gente publicada no es la única que tiene talento y cosas importantes qué decir. Pero para llegar al papel impreso, suceden muchas cosas. No todos tienen los contactos que les hagan llegar a una imprenta. No todos tienen el dinero para financiarse sus propios libros. No todos pueden acceder a concursos. Así, mucha tinta se queda en el camino y el mundo se pierde de conocer maravillas. Además de brindar una forma original de hacernos llegar contenidos, el libro cartonero tiene la finalidad de que tomemos conciencia sobre el medio ambiente: al hacer un libro de cartón, le damos nueva vida a un material de desecho.
La primera editorial fue la Eloísa Cartonera, creada en el 2003 por el escritor Washington Cucurto y el artista plástico Javier Barilaro, quienes dieron el paso al frente ante una época de crisis en la que los libros no se estaban vendiendo. Los libros cartoneros tienen como objetivo promover la creatividad literaria y concientizar sobre el cuidado del medio ambiente. Se explican los pasos para crear la portada, contraportada e historia del libro cartonero y los materiales necesarios como cartón, hojas e hilo. Al hacer un libro cartonero, aumentan las posibilidades de un proceso de inclusión social a partir de vincular el modo de trabajo de una editorial cartonera y su fuerza como movimiento social, con el objetivo de reflexionar sobre las oportunidades de generar acciones inclusivas para democratizar el acceso a la información.
SIGUEN SIENDO LIBROS
Mucha gente cree que los libros son sólo los que sacan las editoriales. Pues resulta que la cosa no es así. Un libro es cualquier material escrito que se publica de cualquier manera y que pueda llegar a un público. Algunas de las características de los libros cartoneros son:
- Sus proveedores son algunos de los miles de trabajadores que colectan papeles y cartones en las bolsas y artefactos de recolección de basura de las ciudades latinoamericanas.
- Los títulos editados son donados por los autores (mayoritariamente, sin percibir contraprestación por derechos de autor). Importantes escritores latinoamericanos cedieron los derechos de alguna de sus obras para que ésta sea “comercializada”.
- Algunas de estas editoriales publican a desconocidos y nóveles autores de las periferias, posibilitando la edición de autores que poseen vedado el acceso a los circuitos editoriales mainstream.
- Sin serialización estándar.
- Con un trabajo de arte y diseños artesanal (las cubiertas son coloreadas a mano a acuarela y témpera).
- Sin cadenas de distribución tradicional propias, la mayoría de sus títulos son distribuidos por los propios autores, vendidos en sus locales o en ferias (aunque algunos de sus títulos son distribuidos por empresas de distribución tradicional).
- Sin impresión profesional (la mayoría fotocopia o fotoduplica los textos).
- El pegado se realiza a mano y encuadernados en cartón.
- Sin registro ISBN de las obras editadas. (Universidad de Cataluña).
Se consideran relevantes las posibilidades que tienen las editoriales cartoneras para generar un importante cambio social. Dentro del sistema escolar, una editorial cartonera permitiría a las escuelas urbano-marginales o rurales tener no sólo más materiales didácticos, sino también más oportunidades de acceso a la lectura e información a bajo costo. Con su propio taller de libros cartoneros, podrían realizar su propio material, lo que fomenta la faceta artística. Respecto a las minorías étnicas o grupos sociales discriminados, pueden encontrar en estos libros una manera de publicar sus historias, experiencias y vivencias, debido a que sus producciones suelen ser ignoradas por editoriales de mayor alcance. De este modo, una editorial cartonera tiene una estructura de funcionamiento flexible que es fácilmente reproducible, con sencilla organización e insumos mínimos, lo cual expande aún más sus potencialidades para generar cambios sociales y políticas de inclusión "(Huespe, 2017)"
Existen grupos como Dirtsa Cartonera en Venezuela y Eloísa Cartonera en Argentina, que están haciendo un trabajo profundo en pro de la difusión de los libros cartoneros. La verdad es que en cada feria del libro se están viendo más libros de este tipo artesanal y la gente está cada vez más abierta a esta propuesta editorial.
Te invitamos a que te animes con tu gente a hacer tus propios libros. Es hora de liberar la palabra.
POR MARÍA EUGENIA ACERO • @mariacolomine
ILUSTRACIÓN ENGELS MARCANO • cdiscreaengmar@gmail.com