11/07/2024. En la escritura teatral la certeza y la incertidumbre son conceptos que pueden actuar de diversas maneras, sobre todo si establecemos una relación entre el universo de la ficción, el universo de quien escribe y el universo del público. Para ponerlo sin muchas complicaciones, es evidente que la incertidumbre de un personaje no representa necesariamente la incertidumbre de quien escribe y, en el mismo caso, el espectador no tiene por qué sentir las dudas del personaje; al contrario, puede regocijarse porque como espectador sabe las respuestas.
También puede suceder que la incertidumbre de un personaje sea la misma que la del escritor y la del público. El famosísimo “ser o no ser” de Hamlet es una pregunta que seguramente se hace el espectador, incluso mucho después se escucharlo o leerlo del personaje. Entre otras cosas porque ese dilema está presente siempre. No terminamos de responder con certeza e incluso no tenemos la certidumbre de estar formulando la pregunta en toda su significación.
Como espectadores podemos establecer una empatía con un personaje, y podemos catalogar a otro de manera tajante. Luego, el desarrollo del argumento nos cambia la percepción o la valoración de uno u otro personaje. Esto ocurre porque los personajes de ficción son, fundamentalmente, los que hacen la historia, los que dan significado al desarrollo del conflicto y los que lo representan simbólicamente. Tenemos dos maneras de “conocer” al personaje. Por el rol y porque nos identificamos con él.
En la vida, sobre todo con todo el aparataje comunicacional, técnico y conceptual, que nos ha invadido la existencia, una persona se transforma en personaje, creamos una identidad con ella, comprendemos que juega un papel importante en la trama cotidiana. Creamos una empatía que cumple un papel dual. Por un lado, lo percibimos a través de los medios, esto lo reviste de cierto carácter ficcional; por el otro, es muy cercano y llena una serie de expectativas y necesidades afectivas, simbólicas e incluso sentimentales. Esperamos de ese personaje-persona cosas que asumimos como nuestras. A veces tenemos que tomar decisiones con respecto a estos personajes-personas que se convierten en dilemáticas. No sabemos con certeza qué hacer. Porque por más que se haya creado todo un andamiaje comunicacional que nos hace sentir el asunto como muy claro, resulta que también tenemos otras percepciones fuera del mundo virtual. Es allí cuando juega un papel fundamental la dicotomía certeza-incertidumbre. Frente a eso debemos apagar los aparatos, pensar relajados, a conciencia y tratar de acercarse a lo que somos, lo que hemos sido y lo que queremos ser.
POR RODOLFO PORRAS • porras.rodolfo@gmail.com
ILUSTRACIÓN ERASMO SÁNCHEZ • (0424)-2826098