16/03/2023. El entrenador argentino José Pékerman terminó siendo una promesa que se vació en la nada. Un ave de paso con mucha experiencia y jerarquía en su impecable currículo, pero sin el compromiso ni la voluntad necesaria para apartar de su lado cualquier obstáculo que se presentase en el largo camino de la Vinotinto hacia la Copa Mundial de 2026.
Ante la encrucijada de mantenerse fiel a la palabra empeñada de trabajar por el sueño de clasificar por primera vez a la selección nacional absoluta a un Mundial de Fútbol o seguir fiel a Pascual Lezcano, cesado como Director General de las selecciones nacionales por presuntas irregularidades, Pékerman abandonó el barco de la Vinotinto.
La Federación Venezolana de Fútbol (FVF) tomó la decisión más correcta y ejemplarizante. Si Lezcano infringió las normas y la transparencia que quiere establecer la nueva directiva del fútbol nacional, lo más sensato fue que lo apartaran del cargo. No podía ser cómplice de cualquier irregularidad cometida por la mano derecha del entrenador argentino. Y si Pékerman tampoco estaba en sintonía con las reglas de juego establecidas, lo mejor fue darle las gracias y enseñarle la puerta de salida con total educación.
La designación de Fernando “Bocha” Batista como sucesor del experimentado entrenador luce lógica en este contexto. Batista tiene un trabajo reconocible en las categorías menores de Argentina, y ayudó a moldear a buena parte de la generación que renovó a la albiceleste y alcanzó el título en la Copa Mundial de Qatar 2022.
Con la contratación de Pékerman la nueva directiva de la FVF ofreció un trabajo a largo plazo enfocado en la renovación y fortalecimiento de las categorías menores, y es precisamente la principal virtud del nuevo seleccionador: Batista es un formador.
También hay otros factores que pesaron en su designación. Uno de ellos es que ya tiene quince meses de trabajo táctico adelantado con la selección, pues fungía de asistente técnico de Pékerman. Hay un camino recorrido que será de mucha utilidad para afrontar las eliminatorias de Conmebol. Batista no empezará de cero para probar piezas y sistemas de juego, como hubiera ocurrido con cualquier otro cuerpo técnico extranjero o venezolano. Los integrantes de la selección ya conocen sus ideas, las pusieron en práctica y esa afinidad entre jugadores y cuerpo técnico es esencial para tener éxito.
A Batista hay que rodearlo de entrenadores venezolanos para que lo acompañen en las categorías menores, y exigirle total compromiso y transparencia para que luche codo a codo con todo el país por el sueño mundialista de la Vinotinto.
POR GERARDO BLANCO • gerarblanco65@gmail.com
ILUSTRACIÓN JUSTO BLANCO • @justoblancoruiz