23/05/24. El pasado 15 de mayo se celebró el día mundial de las familias. El Día Internacional de las Familias se celebra el 15 de mayo de cada año desde 1994. Esta fecha fue proclamada en 1993 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, haciéndose eco de la importancia que la comunidad internacional otorga a las familias.
Hasta ahí, todo bien. Es sano propiciar relaciones interpersonales de afecto, apoyo y solidaridad en las familias venezolanas. Se dice que la familia es la base de la sociedad, y cualquier esfuerzo para que exista la unión y armonía en las personas que comparten parentezco redundará en salud mental y comunidades más fuertes y productivas.
¿Qué hubo detrás de la marcha?
El detalle en esta ocasión fue, que quienes convocaron a la marcha de la familia el pasado 15 de mayo fueron las comunidades evangélicas. Sin desmerecer la fe de nadie, lo que hizo ruido fue que esta ocasión se convirtió en una plataforma para impulsar la religión evangélica junto a todos sus preceptos.
Que nuestro estado esté brindando un apoyo tan contundente a la fe cristiana evangélica enciende algunas alarmas. En los últimos años esta corriente protestante ha venido creciendo como la espuma, haciéndose de cuanto depósito, cine abandonado y negocio se topen por el camino. Incluso, la televisión tiene espacios de una hora pagados por esta iglesia para captar adeptos. Por un lado, se agradece que estas comunidades religiosas estén brindando apoyo a personas perdidas, adictos, desempleados, solitarios y gente sin esperanza. Esto es loable, ya que muchos de estos devotos transforman sus vidas. Es común ver gente regenerada gracias al trabajo de la iglesia evangélica y sus representantes.
Feudalismos de la fe
Preocupa que nuestro estado esté asumiendo una posición tan directa con una corriente religiosa. Es importante recordar que nuestro país es laico. Por lo tanto, no debería existir una preferencia abierta hacia ninguna corriente espiritual. Se ha observado en el pasado que comunidades evangélicas tomaron instituciones, aplicando rígidos códigos religiosos de conducta con sus empleados. Surge la duda, ¿qué pasará ahora entonces con la gente que sigue las religiones africanas? ¿Los van a satanizar por "brujos"? ¿Habrá cacería contra los ateos, wiccanos, hare krishnas, católicos, musulmanes y budistas? ¿Será pecado ahora rezar el rosario o cargar con amuletos encima?
Por otro lado, las luchas de la comunidad LGTBIQ+ se ven seriamente amenazadas por este fuerte espaldarazo. Es bien sabido que los homosexuales no son bien vistos por esta religión. Al darle cancha, automáticamente de seguro los gays y su comunidad pierden gran parte del territorio que han venido forjándose a sangre, sudor y lágrimas.
Por otra parte, esta posición de apoyo abierto y tangible a los evangélicos lanza el mensaje claro de que el gobierno bolivariano no respalda el aborto. Así, la lucha feminista por la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo queda inmediatamente anulada.
Alerta que camina
Comprendemos que el momento histórico actual requiere del apoyo de todos los sectores productivos y creadores de conciencia en nuestra nación. Es un gran logro contar con la solidaridad de diferentes comunidades en esta desafiante etapa electoral. Pero se hace imperante recordar que no debemos únicamente escuchar a un grupo social. Por recibir el respaldo de unos, podemos estar anulando inconscientemente el arduo trabajo que otros importantes representantes de nuestra sociedad han venido desarrollando, y justamente en apoyo a nuestro proceso revolucionario.
POR MARÍA EUGENIA ACERO • @mariacolomine
ILUSTRACIÓN ERASMO SÁNCHEZ