24/10/24. En las redes sociales y medios de comunicación nacionales e internacionales adversos al gobierno del presidente Nicolás Maduro, se ha intentado desacreditar al mandatario por decretar el adelanto de estas fiestas en el país a partir del primero de octubre.
En nuestro país hay quienes ya tienen el sentir navideño desde principios de octubre. El objetivo es la paz y la unión entre todas y todos...
Como siempre, la oficialización de la temporada se realizó en varias regiones del territorio nacional con encendido de luces en plazas, calles, avenidas, incluso, barrios y sectores populares, donde la gente pone el pesebre, el árbol de Navidad y otros adornos típicos. En Caracas, también con el encendido de la Cruz del Ávila (Waraira Repano), símbolo de la época en la ciudad capital.
Pese a la alegría que algunos experimentan, otros se han empeñado en criticar esta felicidad. Caso particular se dio a kilómetros de distancia. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se burló del presidente (y de las y los venezolanos, diría yo) al comentar ante la Asamblea de la capital de España.: “ya es Navidad en Madurolandia”.
“¡Hue… hue… huele a Navidad!”
Al consultar con el público sobre qué piensa de estas celebraciones, obtuve como denominador común la palabra “unión”. Para los venezolanos estas fechas reflejan reconciliación, unidad familiar, entre vecinos y amigos, paz, armonía, reflexión y fiestas.
Natalia Franco, quien admitió que adorna su casa en noviembre, expresó que prefiere llamarlo “oficializar las navidades”. “Es lo que hizo el presidente. Solicitar a las instituciones del Estado comenzar con las fiestas, porque es una época de felicidad y sabemos lo que representa para nosotros en el país”, no obstante, la consultada acotó que, de forma personal, quien no desee adelantarse, “no lo haga y punto. Nadie los está obligando”.
En respuesta a los comentarios despectivos de algunos usuarios de las redes sociales sobre estas decisiones gubernamentales, María Daniela Rendón manifestó que desde hace días está comiendo hallacas. Otras personas indicaron que les encanta ver las plazas adornadas.
Ni hablar de los fines de semana en Caracas, donde la plaza Bolívar y el paseo Los Próceres, por mencionar algunos, se llenan de gente para tomarse la fotico en los arbolitos, las luces navideñas y otros adornos.
Por su parte, Isbelia Farías, habitante del municipio Lagunillas, estado Zulia, precisó que, aunque ella no tiene la costumbre de celebrar la Navidad, allá se oye gaita zuliana desde junio. Aparte de los aguinaldos, la gaita es el símbolo musical de la tradición navideña en Venezuela. Al sentir el ritmo del cuatro, la tambora y el furro, ya sabemos que “huele a Navidad”.
Tahis Urdaneta, quien es comerciante en Caracas, dijo que su familia adoptó la tradición colombiana del Día de las Velitas que se celebra el 7 de noviembre, fecha en la que “pone la Navidad” en su vivienda. Sin embargo, para ella el adelanto es “económicamente una ventaja para el comercio”. Concluyó resaltando que el fenómeno gaitero “es una asociación sensitiva mediante la cultura musical”.
En Cabimas, tierra de donde soy oriunda, se festeja la feria de la Virgen del Rosario el 7 de octubre, y desde que tengo uso de razón, se realiza un “amanecer gaitero”, y, en ese momento, para la gente se viene “la mejor época del año”.
Para la guerra nada
En efecto, el gobierno nacional no está imponiendo a los venezolanos y venezolanas comenzar con las navidades, pero sí es una manera de promover la emoción y el sentimiento de la temporada en cada hogar. En nuestro país hay quienes ya tienen el sentir navideño desde principios de octubre. El objetivo es la paz y la unión entre todas y todos, además, impulsar un aire de armonía en las calles y evitar que se vuelvan estas a llenar de violencia.
Hay personas que ya iniciaron los preparativos de cara a esta época. Aunque, para personas como Neomar Hernández, son días que promueven el consumo, el gasto excesivo y sin “estrenos” y regalos no es Navidad. Pero, Natalia, la primera consultada, acotó que, más allá de lo que significa desde el punto de vista comercial, deben primar los valores de unión, amistad, amor, solidaridad.
Para compartir con sus allegados, no se requiere de una época especial, pero la Navidad se ha convertido, para muchos, en esa temporada de encuentro con los que están. Quienes desean celebrarla antes, pueden ejercer su derecho a la felicidad, quienes no están de acuerdo con el adelanto de las festividades, también están en su derecho, siempre que no vulneren el de los demás. La crítica es válida, pero hasta ahí.
Culmino esta reflexión acotando que la burla de Díaz Ayuso, la política española de la que hablé al principio, salió en primera plana de los medios. Pero, no he visto que critique el genocidio en Palestina, una situación que merece toda la atención de la comunidad internacional. Ella prefirió criticar a “Madurolandia y las navidades”. ¡Ah! Pero, es que España sigue enviando armas de guerra a Israel para seguir asesinando niños y niñas en la Franja de Gaza. ¡Ya lo entendí todo!
POR SARAH ESPINOZA • @sarah.spnz
ILUSTRACIÓN ERASMO SÁNCHEZ