19/12/24. La Barbie lo logró hace tiempo. La muñeca más famosa del siglo XX, le inoculó a las niñas el mensaje de que había que ser rubia, delgada y joven por siempre para tener éxito. Lo mismo pasó con GI Joe, los muñecos Repollito, las Bratz y más. Los juguetes son el arma más efectiva de adoctrinamiento a la infancia. El capitalismo lo tiene claro desde hace tiempo, y de ahí que reproduce patrones socioculturales patriarcales con cocinitas, carritos y más.
La celebración de la Batalla de Ayacucho tiene que ver básicamente con la celebración de la creatividad artesanal de todas las muñecas...Cada quien va a ver y a representar a la batalla en particular...
Muñequería para educar
¿Qué pasa si usamos esas mismas armas a nuestro favor? En Venezuela, y en toda la región latinoamericana, el movimiento de muñequeras y muñequeros está haciendo un trabajo de hormiguita, en aras de salvar a la infancia de las garras del neocolonialismo. Sabemos que se trata de un enfrentamiento bastante desigual, teniendo en cuenta el aparataje mediático y publicitario con que cuentan los juegos de video y juguetes que emulan super héroes y personajes del anime. Pero esta legión de soñadores está haciendo la chamba con dignidad.
Una muestra de esta lucha por el despertar de la conciencia la tenemos en la exposición Ayacucho, entre hilos y telas, que empezó el domingo 15 de de diciembre de 2024 y hasta el 02 de febrero de 2025 en los espacios de la Galería de Arte Nacional gracias a la Red Nacional de Arte y el Ministerio de Cultura. Con esta exposición de muñecas y muñecos de trapo, la Red de Arte conmemora el Bicentenario de la Batalla de Ayacucho.
Se trata de la exhibición de más de ciento cuarenta muñecas y muñecos de tela que emulan a los protagonistas de las batallas de Ayacucho y Junín. Estos muñecos fueron creados por más de cuarenta muñequeras (la mayoría aplastante fueron mujeres), y unos cuatro muñequeros hombres de todo el país.
Cada muñeca y muñeco tiene su propia personalidad y estilo, y cada uno cuenta una historia diferente. La convocatoria para esta original muestra educativa y artística se hizo en apenas un mes. En todo noviembre se invitó al movimiento muñequero a sumarse a esta iniciativa, y así arrancaron con una exposición que no sólo muestra la belleza de las muñecas y muñecos de hilo y tela, sino que también cuentan la historia de las batallas de Ayacucho y Junín, las batallas, firmas de acuerdos y sus personajes más emblemáticos. Uno de los personajes más interesantes de esta exposición es la "Rabona", de la artista zuliana Carmen Salazar. Se trata de una mujer, que en los tiempos de estas batallas se encargaba de recoger a los muertos, de dar alimento, medicina y responsabilizarse de la logística para asistir a los soldados. Nuestra Rabona aparece cargando a sus hijos, vestida de campesina y llena de mucho color. Esta muñeca es una representante importante de la labor de la mujer en la gesta independentista nuestroamericana.
Los protagonistas
El curador César Delgado Flores, abre la exposición diciendo, "doscientos años después, el mismo pueblo bravío y fecundo de libertad celebra a sus inmortales héroes a través de esta exposición de muñecas y muñecos de trapo, personajes que nacen de las manos de estas mujeres para seguir batallando. Cada una de estas piezas, nacidas de la sensibilidad, el detalle y la gloria del pueblo venezolano, representa el amor infinito por nuestros valores culturales, por nuestra emancipación, reivindicando así nuestros saberes, haceres y resistencia".
Tuvimos oportunidad de conversar con Arnaldo Rodríguez, responsable de museografía de la exposición Ayacucho, entre hilos y telas, en representación de la Red de Arte.
¿Por qué hacer una exposición de muñecas en torno a la Batalla de Ayacucho?
La celebración de la Batalla de Ayacucho tiene que ver básicamente con la celebración de la creatividad artesanal de todas las muñecas. El tema esencial que se toma como elemento para hacer la convocatoria, fueron las Batallas de Junín y Ayacucho. La Batalla de Ayacucho arma una linealidad creativa, y una serie diversa de muñecas. Cada una se muestra desde el punto de vista de sus artistas. Cada quien va a ver y a representar a la batalla en particular.
¿Qué anécdota nos puede compartir de este proyecto?
Hay experiencias compartidas con ellas, que se hicieron a través del teléfono. Se habló con muchas de ellas, para saber cómo estaban las situaciones de envío, y la angustia de ellas para poder traerlas. Algunas de ellas estaban comprometidas con la Misión Viva Venezuela, entonces no podían participar. Otras, inclusive, no pudieron enviar las piezas completas. Hay una pieza de Antonio José de Sucre en arcilla. La pieza iba con un sofá, y por razones de peso, tuvo que quitar la silla y enviar solamente la figura de Antonio José de Sucre. Nosotros nos dimos a la tarea de tratar de buscar la silla para poder armar el conjunto gráfico de la obra. Eso me pareció muy particular.
Los invito a que vengan a la exposición. Esta es una oportunidad de poder visualizar todo un mundo de creatividad, de diferencia, de cosmogonía de las muñequeras desde un punto de vista bien particular de la Batalla de Ayacucho.
Muñecas por la historia
Arnaldo Rodríguez nos adelantó, que en enero se celebrarán conversatorios enmarcados en la temática, a fin de difundir al público más detalles sobre este importante Bicentenario.
Les extendemos la invitación a que se acerquen con sus niños a abrazar la historia a través de los colores y belleza de más de ciento cuarenta muñecas y muñecos de toda Venezuela, que nos cuentan entre hilos y trapos cómo fue la Batalla de Ayacucho.
POR MARÍA EUGENIA ACERO • @mariacolomine
FOTOGRAFÍAS NATHAEL RAMÍREZ • @naragu.foto