• Inicio
  • Cuentos
  • Minimanual
  • Agenda Cultural
  • Música
    • Boleros que curan el alma
    • Bitácora sonora
    • Música en acción
  • Caracas
    • Almanimal
    • Caminándola
    • Ciudad
    • En foco
    • Laguna de babel
    • La vida es juego
    • Pichones de Sibarita
    • Trama cotidiana
    • Trota CCS
  • Soberanías Sexuales
  • Miradas
    • Bajo la lupa
    • Crónicas gráficas del patrimonio
    • Envejecer y seguir siendo
    • Falsas Memorias
    • Miradas
    • Séptima morada
    • Visiones Liberadoras
  • Entrevistas
    • Antroponautas
    • Entrevistas
  • Mitos
  • Literato
    • Mejor ni te cuento
    • Préstamo circulante
    • Son tres párrafos
  • La Revista
    • Somos
    • Columnistas
Puedes buscar por Título de la noticia
Inserte el Título

Frida

26/01/2023. Su nombre está escrito en todas partes. Conocemos sus colores, sus formas, sus cejas. Al escribir “pintora” en Google ya nos sugiere buscar su nombre, pero ¿quién fue en realidad Frida Kahlo? Se inscribió como una de las primeras estudiantes universitarias que tuvo México, aunque no llegó a graduarse. Jugaba con su biografía. Su nombre era Magdalena.

Tuvo mucha más vida que Diego Rivera, mucha más política que la que nos contó Hollywood y más pasión mexicana que la ropa. Su raro apellido cuenta que su familia vino de lejos, de Hungría y de Alemania, a sembrarse en tierra latinoamericana.

Sin embargo, el ejemplo de Frida merece que nos sentemos a pensar cómo pudo una mujer convertirse en un objeto, quién la convirtió, porqué, a qué precio y para qué lo hizo. Daniel Bernabé, en su libro “La trampa de la diversidad” nos cuenta que durante mucho tiempo Kahlo era al menos irrelevante, pero dejó de serlo para saltar a la fama dibujada desde las formas y vaciada de contenido. Le pasó, como tantas veces, que queda la consigna, pero se pierde la idea. Entonces, de aquella comunista, nacionalista y revolucionaria, quedaron colores, cejas y flores que sirvieron hasta para que Mattel quisiera comprarla.

¿Quién fue, entonces, fuera de ser el apéndice del gran Diego Rivera, más allá de su tormentosa relación? ¿Quién era por dentro, qué sentía además de dolor? ¿De qué se reía, qué bebía, con quién? ¿Por qué fue a dar León Trotsky a su casa? ¿Era amistad, camaradería o amor? ¿Qué idea les unió, alguna les separó? Curioso que Frida se llamase entonces Magdalena como una de las mujeres más vaciadas de su propia esencia en la Biblia.

Magdalena estaba parada junto a los apóstoles y los financiaba, pero era mujer. Suficiente para no ser llamada a la cena. Fue vilipendiada, ignorada, tachada para finalmente reconocerla mientras su propio nombre dijo cada vez menos. Como Frida, que sin duda tenía mucho más que dejar que la silueta de la paloma que le sirvió de cejas.


POR ANA CRISTINA BRACHO • @anicrisbracho

ILUSTRACIÓN ASTRID ARNAUDE • @loloentinta

Frida Khalo Artista Comunista

Compartir

Noticias Relacionadas

Femicidio

  • 03/05/2024

Elena

  • 05/12/2022

Dilma

  • 28/09/2023

Eulalia

  • 05/04/2024
Ta fino

Mancheta

Es inaceptable
Ubicación
  • Esquina de San Jacinto, Edificio Gradillas “C”, piso 1, Caracas 1010, Distrito Capital
  • 0212-3268703
Enlaces
  • Cuentos
  • Minimanual
  • Agenda Cultural
  • Boleros que curan el alma
  • Bitácora sonora
  • Música en acción
  • Ciudad
Enlaces
  • Soberanías Sexuales
  • Bajo la lupa
  • Antroponautas
  • Entrevistas
  • Mitos
  • Mejor ni te cuento
  • Préstamo circulante
Galería ¡CARACAS VIVA!
© 2022 ÉPALECCS | al ritmo de la ciudad