11/07/24. Estamos en junio y por ello he querido acercarme a personas que hacen culto, a través de su arte, al santo de Lara, San Antonio de Padua. Para los que no conozcan sobre esta festividad que forma parte del Calendario de Tradiciones venezolanas, les daré algunos datos.
San Antonio de Padua o San Antonio de Lisboa (15-08-1195/13-06-1231), fue un sacerdote de la orden franciscana, predicador y teólogo portugués. Su capacidad de prédica era proverbial por lo que fue llamado “Arca del Testamento”. Fue el segundo santo más rápidamente canonizado, luego de San Pedro Mártir de Verona. Es uno de los santos católicos más populares y su culto se encuentra extendido universalmente. Su nombre secular era Fernando Martin de Bulhoes e Taveira Azevedo, que lo cambió cuando entró a la Orden de los Frailes Menores.
En Venezuela esta festividad es típica del estado Lara, donde, como muchas otras manifestaciones, hay una imbricación entre lo divino y lo pagano.
El Tamunangue es, por excelencia, la música para festejar a San Antonio. Se conoce como Sones de Negro, los únicos del país que acompañan a los tambores con instrumentos de cuerdas. Específicamente, el cuatro, quinto, requinto y seis, todos, familia del cuatro. Estos son los sones: La Bella, La Juruminga, El Poco a poco, El Yiyivamos, La Perrendenga, El Galerón y El Seis Figureao, pero antes se hace una Salve en honor al santo y luego se hace la Batalla con los garrotes. En el año 2014 fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación.
Cada 13 de junio se hacen misas y, hombres y mujeres ataviados de vestimentas coloridas, frente al santo y siempre pidiéndole permiso, se ponen a bailar. Otra cosa es que la gente le pide a San Antonio que le consiga pareja, o poder encontrar un objeto perdido. Igualmente, hacen promesas por sanación y protección para niños pequeños.
En una edición anterior, les hablé de María Eugenia Armas, bailarina y bailadora de las expresiones tradicionales, y hoy les quiero hablar de Pedro Colmenares, quien es un cantor aventajado de la música larense. Cantor de voz atiplada y tocador de cuatro; es un músico muy popular y querido y para mí, Pedrito es como un duende. Lo digo por su carácter siempre afable y juguetón.
En el ambiente musical de su casa, en el bloque 30 de Casalta, pudo escuchar y apreciar los bellos sonidos, por ejemplo, canciones de Julio Jaramillo y Felipe Pirela, y recuerda que muchos vecinos se ponían a cantar, cosa que le gustaba muchísimo. Todos estos elementos lo llevaron a interesarse en ese arte.
Canta, toca el cuatro y toda la familia larense del cuatro: requinto, cinco, seis, así como la tambora y maracas. Ha formado parte de la Sociedad Tamunanguera, de Sol Larense y su gente, Ágave al Natural y Somos 4 la Banda. Con su arte ha tocado en el Teatro Municipal, Casa José Martí, Casa de las Primeras Letras “Simón Rodríguez”, Universidad Central de Venezuela, entre otros. En el ámbito internacional, visitó la ciudad de Praga. Compartió con músicos maestros José Ignacio Hernández, Marta Doudiers, Mónico Márquez, Soraya Padrón, Omar y Oscar Lista, Ismael Querales y Jesús Rondón, entre muchos.
Cree que el cultor y artista deben cultivar y promocionar la cultura musical y mostrarla a la mayor cantidad de personas posible. En el caso del Tamunangue, que se conozca en todas las regiones y que también se lleve al ámbito internacional. Opina que hay que hacer un esfuerzo en mostrar más nuestras tradiciones en las escuelas y liceos. Hoy en día está concentrado en el proyecto de hacer y reparar instrumentos, ya que es una actividad que le da mucha satisfacción. Les dejo un correo por si quisieran contactarlo para un contrato tamunanguero o la reparación de un instrumento: colmenarespedro360@gmail.com.
POR ROCÍO NAVARRO AMARO • epale.rocio.navarro@gmail.com
FOTOGRAFÍA CORTESÍA