05/12/2022. La fase de grupos del Mundial de Qatar ha ofrecido un retrato muy fiel de cada uno de los equipos en esta cita en el desierto. De los cabezas de grupo que llegaron con la chapa de favoritos a levantar la copa el 18 de diciembre en el estadio Lusail, solo cumplieron con el papel asignado la actual campeona mundial Francia y la pentacampeona Brasil.
Pese a la epidemia de lesiones que mermaron a la selección francesa, incluyendo la baja a última hora del Balón de Oro y principal artillero de la plantilla, Karim Benzema, el equipo azul no vio afectado el rendimiento colectivo ni la contundencia para resolver los partidos. En su victoria 4-1 sobre Australia, la selección de Didier Deschamps sufrió un contraataque fulminante de Goodwin que abrió el marcador pero en nada afectó anímicamente a los galos.
Rápidamente se recompusieron y marcaron con hierro las nuevas condiciones del partido. Desplegaron su movilidad y fueron profundos, cayendo por las bandas con los desbordes de Dembelé, Theo Hernández y Mbappé que derivaron en los cuatro goles, dos de ellos de Oliver Giroud, quien volvió a ser el centrodelantero titular, como en Rusia 2018. Pero a diferencia de hace cuatro años, cuando los azules fueron campeones sin que Giroud anotara un solo gol, esta vez el número 9 será esencial para aprovechar los pases en el área de sus compañeros.
Mbappé es por ahora la gran figura del Mundial, por encima de Messi, Cristiano y Neymar. Su potencia para picar, conducir en velocidad y dejar regado a los rivales, recuerda esa superioridad que mostraba Ronaldo Nazario con Brasil en Corea y Japón 2002. El delantero del París Saint-Germain tiene una marcha más que todos los defensas que salen a enfrentarlo en el uno contra uno, como lo demostró en el primer choque ante Australia y lo ratificó el sábado con otra soberbia actuación. Con par de goles quebró la resistencia de Dinamarca y selló la clasificación de los galos a segunda ronda.
La lesión en el tobillo derecho que sufrió Neymar en el choque ante Serbia no impidió que Brasil también se clasificara a octavos de final. La movilidad y capacidad técnica del equipo de Tite demolió las murallas defensivas que levantó Serbia, en el primer choque, y luego abrió el cerrojo de Suiza en el segundo duelo.
La habilidad de Richarlison, con una media volea de antología, fue clave para sellar el triunfo ante los balcánicos, y la omnipresencia del todocampista Casemiro para definir en el área como un 9 clásico, demostró la infinidad de recursos de Brasil para abrirse paso en Qatar.
POR GERARDO BLANCO
ILUSTRACIÓN JUSTO BLANCO